martes, 11 de junio de 2024

 


Ventidos treinta y cinco, pasaba puntualmente un morocho, 

de bombacha, alpargatas, pañuelo al cuello, chambergo y

limpísima camisa blanca.

Todas las noches lo esperaba, abría un poco la ventana para escuchar

su vozarrón recitando algún pasaje de Almafuerte,

Veintitrés y diez era su regreso, con un cigarro de hoja y un porrón de ginebra.

Una noche salí para saludarlo, presentarme, y nunca más volvió.  

Tal vez era una anima bendita, nunca tuve intención de molestarlo.


Cadeza de Apio 11Jun24

lunes, 10 de junio de 2024

 


Un potente grito primitivo, llevo mi vista a la tercera rompiente, olvidé mi miedo al mar y que nunca habría logrado ni siquiera flotar.

Raspé mi pansa en la arena en una torpe zambullida, tomé su mano en un agua helada.

Me incorporé, con mucha vergüenza, reparando que la marea no superaba las rodillas.

¿Estas bien? me respondió ¿en el cielo?

Llegamos a la arena seca sin darnos cuenta, de que aún estábamos de la mano.

Solo hubo un reclamo, "no puede mirarme así, sin generar consecuencias".

Vamos a ducharnos con agua caliente, vivo en el edificio de enfrente...


Ufa, me despertó Nina, mi gata que quería salir.


Cabeza de Apio 10Jun24


sábado, 8 de junio de 2024

 


Lujuriosas palabras de auto ayuda,
creadas por mentes complacientes,
llenas de odio al olor humano.
Al no pensar,
ser común, monótono, mecanizado,
uno más, liso.
Parte de lo que llaman neurona artificial.